7/26/2008

Miradas Independientes S.A.

Últimamente han ido cambiando muchas cosas, he logrado cosas y como siempre he desechado muchas otras, no por que crea que no pueda realizarlas, si no que simplemente las encuentro irrelevantes dentro de mis abstractos objetivos, ha de ser por que mis objetivos han ido mutando a micro-objetivos que forman un macro-deseo, pero creo que hay cosas que aun no cambian, como por ejemplo la percepción del publico en mi circo cotidiano, ¿Por qué siempre que miro a alguien, ese alguien piensa que aquella mirada implica alguna intención?, a veces uno mira lisa y llanamente por que no puede andar con los ojos cerrados, lo peor es tener una mirada expresiva y descontrolada, desde que era un niño siempre me decían la típica frase, “Me caías súper mal, por como me mirabas, tienes una mirada tan extraña…”, u otras frases de ese calibre como “¿Te hay fijado como me mira ese weon?, o sea… sí, uno a veces “jotea” pero es extraño cuando lo dice alguien en que ni siquiera te has fijado.

Siempre he tenido la misma actitud frente a personas que vengo conociendo, si la primera vez la conversación dura mas de 15 minutos, quiere decir que nos llevamos bien, si no lamentablemente no hay nada mas que hacer, no me nace, ahí es donde la mirada falla y no cumple su función de decir, “hey!, no me agradas”. Y por el contrario, cuando una persona me agrada no se por que la miro con cara enojo o desprecio, como diciendo “hey!, no me agradas”, eso es muy extraño, debe ser por eso que no he hecho muchos amigos últimamente.

Lo que no ha cambiado, es cuando en una conversación mi mente comienza a desvariar y aun sigo con la mirada plena atención, es molesto tener que viajar en un bus todos los días mirando por la ventana, paisajes ultra repetidos y sin novedad, solo para no tener que cruzar miradas con nadie y evitar que la mirada te traiciones y exprese intenciones erróneas.

Ha de ser por eso que me gusta tanto la mirada de “mi amiga”, su mirada dice mas que sus palabras, el problema es que no se si a ella su mirada la traiciona al igual que a mi, y que en realidad su mente solo desvaría, bueno ese es otro tema.

Entonces esta claro que “una mirada dice mas que mil palabras”, el problema es lo que esa mirada inquieta expresa sin tu consentimiento.

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